Entrevista a Carmen Pla

CarmenPla

Entrevista por: Hallie Hernández Alfaro

Soy profesora titulada en yoga terapéutico, amante de la naturaleza y de los animales, pero lo que más me gusta es rodearme de buena gente.

 

– Tu poética es sólida y muy cuidada. ¿ Cómo ha sido tu incursión en el mundo de la escritura ?

Desde niña siempre me fomentaron la lectura. Las aventuras de Julio Verne me abrieron todo un mundo, creo que es fundamental la lectura para enriquecer la palabra. En mi época de estudiante tuve la suerte de tener un profesor de lengua y literatura que me hizo valorar ” el arte de la palabra” y la importancia del buen uso del lenguaje. Me presenté a un concurso de poesía y quedé finalista. Ahí comenzó todo. Me aficioné y realicé dos talleres de creación literaria que me han servido de mucho.

– ¿Qué autores han sido fundamentales para tu formación literaria?

Me fascinaron: Pedro Salinas, Miguel Hernández, García Lorca, Machado… me despertaron la sensibilidad para cultivar los buenos sentimientos, sentirme humana y útil. Me llevaron por un camino de aprendizaje continuo. También tuve dos grandes referentes; Hermann Hesse y Walt Whitman, me pusieron el mundo al revés.

– A menudo se habla de poesía de género, ¿Existe, en tu opinión, una diferencia sustancial entre la poesía escrita por mujeres y la escrita por hombres?

Creo firmemente que la sensibilidad abarca a los dos géneros, la facultad humana y la inteligencia para escribir una obra. Es cierto que la mujer necesita trabajar más para conseguir lo mismo, es el handicap y estereotipos fundados que aún laten y nos han perjudicado. Se sigue leyendo poco a las mujeres. También es verdad que hay mujeres que han marcado historia por su tenacidad admirable.

– Puestas a fantasear, ¿Cómo visionas la poesía dentro de medio siglo? ¿Avanzaremos con las tecnologías de punta o quedaremos rezagados y con posibilidades de extinción?

Como decía Gabriel Celaya “La poesía es un arma cargada de futuro”. Mientras el ser humano necesite expresarse, comunicarse y tenga memoria, la poesía estará presente, no creo que muera en el tiempo, siempre que nos identifiquemos con una obra será actual. La tecnología avanza, prueba de ello es todo lo que ahora mismo se mueve por internet. El problema, es cuando no se hace buen uso y se convierte en un espacio tóxico promoviendo la competitividad o el narcisismo. Ahí estaremos perdidos. Creo que la palabra se puede prestar para hacer verdaderas innovaciones virtuales, crear nuevos conceptos o símbolos con el fin de trasmitir y comunicar.

Muchas veces sucede que nos identificamos plenamente con una obra y casi sentimos que somos parte de ella. ¿Ha habido alguna obra de narrativa, novela/ensayo/ cuento corto/ que hayas leído y que sintieses tan propia que hubieses querido escribirla tú?

El libro “Nada” de Carmen Laforet por la mezcla de realismo y existencialismo.

– ¿ Cómo sientes el acto creativo ? ¿Pulsión, visión, mezcla de ambas, razón?

La necesidad de escribir va surgiendo, me ayuda mucho el espacio abierto. La filosofía es otra de mis pasiones, me gusta encontrar respuestas y de un modo u otro me sirve de guía para escribir. Tengo la suerte de poder compaginar mi profesión con la afición a escribir, me sirve de puente y punto de referencia con la creatividad, donde afloran con facilidad los sentidos y la sensibilidad. Creo que mi profesión es la continuidad de mi poesía y viceversa. Me hace desarrollar la intuición que me resulta favorable y positivo para escribir.

– Según tu criterio, ¿qué función cumplen los foros virtuales de poesía en el desarrollo de los autores noveles?

Cumplen un papel fundamental, te abre una puerta, te permite conocer, aprender y corregir, siempre que sea un lugar donde se valore a la persona y el ánimo para desarrollar crecimiento. El trabajo y las exigencias son de cada uno, después siempre puedes seguir por otras sendas. Para escribir poesía hay que leer mucha poesía, me parece un requisito fundamental.

– De los poemas que has leído, me gustaría que nombraras dos de tus favoritos.

Me gusta mucho el poema de Maria Pilar Gonzalo “Ya no estás solo” por la fuerza de trasmisión del vacío de dolor y de ausencia, es un poema que ayuda a sentir y a pensar el sentimiento. Y el de Jerónimo Muñoz ” Orden remendada” por el conocimiento en técnica y calidad poética.

 

Ha sido un placer y un honor compartir este momento contigo, Carmen, Mil gracias.

 

Tres poemas de Carmen Pla:

 

Te explicas como nadie

 

Llegas y vas más adentro

donde hablan los deseos,

 

un beso no se hace sin revuelo,

sin labios, dedos, y un iris muy secreto.

 

Me oyes y te oigo, me tocas

con tu deseo realizado,

 

sobre neblinas de aureolas

de senos sonrosados.

 

Un océano diminuto

de savia verdadera,

entre huecos que presienten

las últimas prendas.

 

Tócame, si logro imaginar

tus manos tibias,

mientras mi sudor

humedece tu rostro.

 

Tócame, tócame otra vez,

que algo dentro se suicida

mientras los dedos juegan

los últimos milímetros.

 

 

Tres hojas

 

Soy del poema la cabecilla de un pozo seco,

argumento que desborda la imaginación.

 

Elevación y crecida

vida y muerte,

una escalera medida y desnuda

revestida de la creación.

 

No sé si me sostienen sus peldaños,

sus barandillas,

el ruiseñor diabólico

que me tala en silencio interior;

la aurora de la conciencia

en toda la jornada en sus frágiles ramas,

o la extremada fragancia que huelo a rededor.

 

Estrella del destino, puerta que me ciñe

de un patio mi prisión,

flores serviles me recogen

en esa oscuridad y reclusión,

formando un áspero ascetismo

del discernimiento mi conclusión.

 

Tres hojas de la tierra prometida:

la de mis ojos en sueño,

la vigilia de la razón,

y una última postergada y ufana

escondida en el áurea dormida;

que sólo me despierta

el oído del creador.

 

 

La palabra que te lee

 

Las palabras nos leen con la misma emoción

que un pájaro atraviesa el cielo de tu verso,

con el labio preciso de tu boca que modela

la inusitada llama;

el pétalo de lluvia ajado por la lágrima.

 

No sé de ti ni de tu silencio,

no sé cuando golpearon los tibios recuerdos

transportando la pasión que siento.

 

Las noches con engendros de quimeras viejas,

que olvidaron la identidad de nuestros cuerpos.

 

Volví a creerme una alondra con viento en las entrañas,

una flor deshojada por la nieve del abismo,

un afán recubierto de anillos añorando el olvido,

las palabras,- tan tuyas -, siguieron haciendo mi trabajo.

 

Fueron bocas que humedecieron los sueños

proclamando: las tardes que no vivimos,

las lluvias que no mojaron.

 

Ayer las vi,

salían del cincel de las sombras,

vibrando con la misma intensidad que el amor

y zozobrando estriadas huellas viscosas.

 

No encuentro los adjetivos adecuados

ni los amaneceres deslumbrantes,

pero… – si la palabra que te lee –

leyendo te siento sin dividir el tiempo,

con todas las cortinas ocres de tus ojos.

 

Cuando caen de un soplo en su letargo,

mi voz descansa todavía en ti.